Esta es mi historia.

Comencé mi formación de actriz en el año 2018. Quería retomar mi vocación por el canto y me topé con un grupo amateur de teatro musical. Ya había hecho teatro alguna vez años antes y pensé ¿Por qué no? No me imaginaba lo mucho que me iba a llenar. Combinar cantar estando dentro de personaje me pareció una experiencia increíble y comencé a ir más allá. Busqué escuelas profesionales de ello y realicé varios workshops trimestrales, pero aún así quería profesionalizarme aún más, hasta que el que sería el tercer año de mi formación encontré un grado que podía compatibilizarse con mi trabajo (veterinaria a domicilio) y cuyas clases ya no estaban enfocadas en montar una obra sino en asentar las bases y salir con un título y una formación completa en todas las disciplinas que engloban este arte.

Durante este tiempo me interesé también por la interpretación ante la cámara y fui probando varios cursos y he comprobado que me gusta tanto como el teatro musical.

A día de hoy, sigo formándome, pues creo que en esta profesión es importante no parar nunca de formarse, para poder dedicarme en un futuro en pleno a la que es mi pasión que es la interpretación, ya sea en el área que más me gusta que es el teatro musical o sea en teatro textual o ficción.